Sabina Hotel Arenas de San Pedro

Reseña de un crítico de hotel

Mi reciente escapada al Sabina Hotel fue un verdadero deleite para los sentidos, comenzando con la impresionante vista a la Sierra de Gredos. La habitación que disfrutamos contaba con una entrada privada y un pequeño patio donde pudimos desayunar al aire libre, todo un lujo. La limpieza y la decoración contemporánea del lugar, junto a su tranquilidad, hicieron que cada momento fuera puro placer. El desayuno fue un festín con productos locales, y lo mejor es que incluían opciones para mi acompañante celíaco, algo que valoro enormemente. La amabilidad del personal, especialmente de Raúl, quien nos recibió con una sonrisa, hizo que nuestra estancia fuera aún más especial. La piscina, aunque fuera de temporada, me dejó con ganas de volver en verano a disfrutar de un buen baño entre la naturaleza. El Sabina Hotel es perfecto para desconectar y disfrutar de un poco de paz, ideal ya sea en pareja o con amigos. Sin duda, espero regresar pronto para seguir saboreando todo lo que este rincón tiene para ofrecer. ¡Recomendadísimo!